La economía castellano-manchega consolida su crecimiento, apoyada tanto en el sector exterior como en la demanda interna. Castilla-La Mancha podría crecer un 3,3% en 2015 y 2,9% en 2016, y crear unos 35 mil puestos de trabajo en el bienio. Reducir la tasa de paro, aumentar la tasa de actividad, mejorar la productividad y reducir déficit
Es más, las previsiones existentes en estos momentos nos sitúan con un crecimiento por encima de la media nacional, algo que ya venía ocurriendo durante los informes anteriores presentados por esta prestigiosa entidad al Gobierno de María Dolores Cospedal.
Los motivos centrales de estas conclusiones son el crecimiento de la demanda interna, la cual han calificado desde el BBVA como algo “sorprendente” por su evolución en los últimos trimestres.
Igualmente han analizado “el cambio de tono en la política fiscal” que ha provocado un crecimiento adicional del PIB del 0,5% y, por supuesto, el espectacular incremento de nuestras exportaciones durante toda la pasada legislatura, no sólo en el sector de los alimentos y el vino, sino también en materia de manufacturas y bienes de equipo.
Concretamente, un dato que es inequívoco es que antes de la crisis económica el peso de nuestras exportaciones suponía un 8% del PIB mientras que actualmente se encuentran por encima del 14%.autonómico son los principales retos que tiene la economía de nuestra región por delante.