En muchos sitios de España se desayuna, en la mayoría de lugares de Castilla-La Mancha se almuerza.
Hasta que uno no ha almorzado en esta región no entiende el verdadero significado de esta palabra, muy alejada del brunch británico o del castizo tentempié.
“El que no ha almorzao en La Mancha es que no sabe lo que es almorzar”. Gran verdad. Del tradicional almuerzo en el campo, que hoy se da esporádicamente o en torno a alguna tradicional celebración, hemos pasado al almuerzo mediomañanero en el bar. En localidades como Tomelloso, Membrilla, La Solana, Daimiel, Manzanares o Bolaños de Calatrava (y en general en todos los núcleos rurales de nuestra región) hay establecimientos especializados en ello. Incluso con el menú de almuerzo puesto en sus pizarras. Hay quien dice que es eso, medio menú, no les hagan caso, es menú y medio.
Normalmente se sitúan a las afueras de estos municipios, con espacio suficiente para que aparquen cómodamente y sin muchas maniobras turismos, motocicletas, furgonetas, tractores sin y con remolque, y últimamente hasta quads. Raciones de champiñones; oreja a la plancha; mucho pan cantero; gachas y migas (en los días en el que el mercurio cotiza a la baja); huevos con torreznos de pan (también conocido como sopeja de huevos); fiambre variado; media tortilla española o entera; tocino y otras zarandajas colesterolerasvariadas asadas; vino (con o sin gaseosa) y café de colofón, e incluso un chupitejo de hierbas o similares espirituosos suelen constituir este ágape medio mañanero, que se disfruta junto a amigos o compañeros de corte y se saborea pausadamente.
Además, se suele hablar concienzudamente sobre el campo y la agricultura, excepto los lunes que el que acapara las conversaciones es el fútbol. Afortunadamente en el mundo del agro no se habla de Belenes Estebanes y demás pelaje televisivo.
En la agraria localidad de Membrilla, en especial los días de lluvia, se suelen juntar una gran cuadrilla de estos agricultores a la hora del almuerzo, arreglan el sector agropecuario en un santiamén. Tal es la profundidad de sus temas de actualidad que el susodicho establecimiento recibe el sobrenombre de Bruselas, la sede del Parlamento Europeo. Imaginen el nivel de las conversaciones.
Si cualquiera de ustedes es capaz de almorzar a la manchega y luego llegar a su casa a comer es un verdadero valiente o un fiel seguidor del consejo sabio de que más vale comer dos veces que dar explicaciones. Pero sigan haciéndolo es muy nuestro y no se debe perder nunca. Y si se han pasado, pues el régimen se empieza el próximo lunes.
Un cordial saludo de A.G.O.